En MP Asistencias, sabemos que uno de los mayores temores cuando se enfrenta una crisis financiera es la posibilidad de perder bienes por medio de un embargo. Por eso, muchas personas que se acercan a nosotros con deudas acumuladas, nos hacen una pregunta clave: ¿me pueden embargar si ya estoy en proceso de insolvencia?
La respuesta es no, y aquí te explicamos por qué.

¿Qué significa estar en proceso de insolvencia?
La insolvencia económica es una herramienta legal que permite a personas naturales y empresas renegociar sus deudas bajo la protección de la ley. Al iniciar este proceso ante un centro de conciliación o la Superintendencia de Sociedades, se activa un blindaje jurídico que protege tu patrimonio mientras se busca una solución con los acreedores.
¿Qué pasa con los embargos una vez inicias el proceso?
Una vez se admite formalmente tu solicitud de insolvencia, se suspenden los procesos judiciales de cobro, incluidos los embargos. Esto significa que:
- No pueden iniciar nuevos embargos en tu contra.
- Se detienen los embargos que ya están en trámite.
- Tus acreedores no pueden tomar acciones individuales mientras se desarrolla el proceso.
Este freno legal es clave para darte un respiro financiero y la oportunidad de construir un acuerdo de pago justo y viable.
¿Y si ya me embargaron antes de iniciar la insolvencia?
Si ya tienes embargos activos (por ejemplo, sobre tu cuenta bancaria o salario), estos pueden ser revisados y suspendidos una vez se admite tu proceso de insolvencia. El objetivo de la ley es evitar que uno o varios acreedores afecten tus ingresos sin una solución integral.
¿Qué beneficios obtengo al acudir a la Ley de Insolvencia?
Además de detener los embargos, acogerte a esta ley te permite:
- Unificar todas tus deudas en un solo proceso.
- Negociar con tus acreedores en condiciones equilibradas.
- Proteger tu patrimonio y el de tu familia.
- Recuperar tu estabilidad financiera de forma legal y transparente.
En resumen:
No, no te pueden embargar si estás en un proceso de insolvencia debidamente admitido.
La ley está de tu lado para darte una segunda oportunidad.